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martes, 30 de octubre de 2007

Los actores


Isi Rojano

Lo conocí en el casting, para mí fue el mejor de los actores que llegaron a las audiciones y no me equivoqué con él. Hizo muy bien su trabajo, y fue g
randemente responsable desde los ensayos que hicimos en la casa de cultura Iztaccihuatl. Siempre llegaba a tiempo y nunca faltó un solo día en los meses que duramos. Le encantó la historia desde un principio y a medida que trabajamos por el bien del proyecto desde la pre-producción, se hizo una buena amistad no sólo conmigo sino con los demás partícipes de la película.
En el rodaje estuvo siempre dispuesto a realizar todo lo que se le pidiera sin objetar a pesar de las múltiples complicaciones que tuvimos. Si bien hubo contratiempos y a veces disgustos, Isi hizo bien su labor dando mucho más de lo que se le pedía por sacar el personaje lo mejor posible.
Desde un inicio me preguntaba todo acerca del personaje, atendía desde los ensayos de la mañana hasta la tarde, leía por su cuenta información acerca de la personalidad y enfermedad del personaje y practicaba a cada momento siempre para, no sólo actuar el personaje, si no vivirlo. Exactamente como creo que debería aplicarse un actor en serio y profesional.
Estuvo ahí estudiando su parlamento, practicando sus movimientos, generando sus emociones, esforzándose al máximo y no sólo eso, si no que cuando se necesitaba una mano en producción, olvidando que era actor estaba dispuesto a aparecerla a cada momento por lo que fue un gusto haber trabajado con él y definitivamente lo llamaría en alguna producción a futuro.
Hizo amistad con todo el grupo por lo que hubo diversión en el rodaje, chistes, tristezas, malos entendidos y delicias. Fue un trabajo de equipo, casi una familia y bien se le recuerda con gusto y ganas de volverlo a encontrar y revivir momentos de gracia.


Ariane Pellicer

Sabía de ella desde hacía tiempo por lo que la buscamos desde un principio para ofrecerle el papel de Alejandra Alcántara, una mujer enferma, maltratada que todos en el pueblo la catalogaban de loca.
Leyó el guión y le fascinó la historia especialmente el sorpresivo final que da un giro sorprendente en la película. Y aceptó actuar en ella y ser parte del grupo.
Trabajamos, al igual que con Isi, en la casa de cultura Iztaccihuatl y desde la lectura del guión le expliqué mi intención y visión como creador de la historia y director. La hablé de la estética, del lenguaje y de la cultura japonesa en la cual está, no sólo influenciada la historia sino que es una adaptación de una leyenda japonesa de la edad media por lo que sintió un agrado mayor para representar su papel.
Trabajó como lo que es: una buena actriz profesional y responsable. Laboró con seriedad, respeto y compromiso; por lo que fue no sólo un gusto trabajar con ella si no un honor y si así lo desea, me gustaría volver a hacer otra película con su presencia por lo que le ofrecería otro papel e historia interesante.


Anahid Herrera

Fue la última que se unió al grupo, oriunda de Patzcuaro, Michoacán. Si bien con poca experiencia, no por eso no se comportó a la altura o de manera profesional. Lo hizo y de una forma sorprendente: su personaje, Natalia Alcántara, debía pasar por penurias y dolores, golpes y humillaciones, miedos y sorpresas. Y así Añadí soportó todo. Horarios de trabajo exhaustivos, escenas complicadas con maquillaje encima que a veces ni siquiera podía ver, poco tiempo de ensayo por ganarle al sol, y no sólo eso, si no lidiar con estudios de su escuela con exámenes cada día más cerca y una pronta gira por la república en una compañía de danza.
Por lo que ella trabajó con más ímpetu, con horarios de rodaje más densos y arduos; y sin embargo, nunca se le escuchó decir una palabra de queja. Estuvo al 200% desde la audición y desde el momento que dijo: “sí le entro”. Por lo que fue un placer laborar con ella y los demás partícipes del grupo Ilustrato la respetan y la recuerdan con apego.


Manuel Vela

El personaje de Claudio pasó como por seis actores. Algunos no me convencían y los que sí, no podían o luego se les complicó las fechas de rodaje. Por azares del destino, Manuel llegó al rodaje a últimas horas. Arribó a Pátzcuaro cuando ya llevábamos unos tres días de rodaje y llegó en su troca que había conducido desde ciudad Acuña, Coahuila. Casi toda la república para estar listo para lo que se ofreciera en la película. Se aprendió los diálogos en el viaje y a pesar de pocos ensayos mientras se arreglaba el set, las luces, la cámara y todo lo necesario para el rodaje, Vela estuvo ahí atento a cualquier indicación y dando lo mejor de sí. Buen amigo que disfrutó todo el tiempo de la producción, y hasta nos deleitó con unas canciones en la fiesta final de la película. Actualmente está a la espera, igual que todos de ver finalmente la cinta concluida y apoyarla en todo momento.


Sara Cortijo
Española radicada en México desde hace varios años. La conocí en las audiciones para el papel de Susana. Era un personaje, quizá no dramáticamente muy complicado pero sí físicamente difícil de hallar. De entre otras actrices Sara no sólo tenía el físico para hacerlo, o las tablas para interpretarlo, sino la disponibilidad y el entusiasmo para trabajar en un proyecto independiente. Fue agradable trabajar con ella. Es luchona, abierta a cualquier indicación que se le daba y dispuesta a dar el todo por sacar el rodaje. La traté poco pero me agradó su trabajo y vi una mejoría actoral a medida que avanzábamos en el rodaje. Es una mujer de todos mis respetos que me gustaría saludar otra vez, ya que desde entonces no la he visto y creo que estará esperando la premiere con gusto igual que todos los demás.


José Juan Núñez